LAS FOTOS LAS VOY A DEJAR DE LA FORMA EN QUE ESTÁN. COLOCARLAS EN SU SITIO, HARÍA QUE PERDIERAN FUERZA. cADA LECTOR QUE IMAGINE EL LUGAR DONDE SE ENCUENTRA, LEYENDO LA DESCRIPCIÓN DEL BLOG..
GRACIAS POR LEERME
Este día lo esperábamos con mucha ilusión. Habíamos visto,
anteriormente, los lugares a visitar y claramente nos iba a gustar. Esta vez no
hubo sorpresas.
El día anterior avisaron por megafónía interior y por papel
impreso que la salida del barco se realizaría a través de lanzaderas. Barcos
mas pequeños, con capacidad para 90 personas, que nos acercarían hasta el
puerto o muelle de salida del autobús. Autobús que, oh casualidad, ponía que
iba a ser a pie, como el de Bergen, pero con un BUS, el 27.
Desayunamos fuerte y bien, porque el viaje iba a ser largo y
movidito. Muchas paradas para admirar los fantásticos lugares y paisajes que
íbamos a ver. Primero fuimos hasta Nvalen y luego a Nos. Estábamos a unos 500
metros por encima de un lago que era una verdadera maravilla de la naturaleza.
Nos bajamos para hacer fotos y, a continuación, bajamos hasta el nivel fiordo,
a la iglesia de Norsida. Volvimos a nuestro lugar de salida, bordeando el lago Hornindalsvatnet.
Una preciosidad y maravilla de la naturaleza. Era un lago interior, diferente al
fiordo, anteriormente visto.
Se queda para nuestro recuerdo, los impresionantes cambios
de colores, de todos los matices; desde el verde más claro, al más oscuro, del
amarillo al marrón, al blanco níveo. Todo ello reflejado en el fiordo, como si
fueran dos cosas en una. En la retina y een el interior de nuestro cerebro
quedan los maravillosos matices de colores que vimos. Espero que las fotos
tomadas, sean un mínimo reflejo de lo que aquí expongo.
Cogimos la primera lanzadera qen la que pudimos entrar y nos
dirigimos hacia el barco. Llegamos a la hora de la comida y teníamos hambre.
Comimos muy bien, nos bebimos dos “pintas” de cerveza bien fresquita y nos
echamos un rato de siesta.
Nos arreglamos un poco
para oir algo de música en directo, en esta ocasión al Duo Sunset & Duo
Real, con nuestro café en mano. Y hacia las 19’15 nos dirigimos como cada tarde
hacia L’avanguardia. Esta tarde ponía Alma Flamenca y a fe que fue flamenca. A los
andaluces y españoles que allí estábamos se nos pusieron los pelos de punta. Algunos
se animaron en medio del pasillo a bailar sevillanas, o bulerías. El resto del
público asistía atónito, tanto al espectáculo del teatro como al que se hacía
en los pasillos. Realmente magnífico. Todo esto con una tónica para corregir un
poco el estómago, que ya estaba empezando a ser cargado demasiado.
La cena a partir de las 20’30 h y, al
acabar, algo de música en directo, hasta las 11h, más o menos.
El día había largo,
provechoso y cansado y mañana, en Olden, lgo me decía que iba a ser más
cansado. Un rato de tanquilidad viendo atardecer desde el balcón y, a dormir.
Cándido Lorite
17 de mayo.
Nordfjordeid, Noruega.
Un pedazo de crucero, y un pedazo de reportaje, con toda su explicación... fantástico
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