miércoles, 8 de abril de 2015

SEVILLA. DÍA 27. EL SALVADOR Y LAS SETAS

Dejamos la Giralda y el Patio de los Naranjos por la Puerta del Perdón y salimos a la calle Alemanes. Callejeando por la calle francos llegamos a la Plaza de El Salvador.
La mañana estaba realmente esplendorosa, invitaba a una cerveza en esa plaza, llena en esos momentos. Decidimos entrar en el Salvador antes de que cerrara al mediodía y tuviéramos que volver a la tarde, dejando de sitio otros lugares.
            La plaza debe su nombre a la iglesia de El Salvador,
El Salvador
manierista del siglo XVII, que constituye la más grande la capital, detrás de la catedral. Es una plaza peatonal, abierta al público para toda clase de actos. En ella se encuentra la estatua dedicada a Martínez Montañés; se le plantaron naranjos en la década de los 7 y se hizo peatonal en los 80.
            Como segundo templo de la ciudad tuvo rango de colegiata hasta mediados del siglo XIX, que lo perdió debido a la desamortización de Mendizábal y la venta de casi todo su patrimonio, Ha tenido diversas transformaciones y obras; la más importante y que le ha devuelto parte de su esplendor se realizó desde el año 2003 hasta 2008.
Calle Sierpes
El Salvador, anocheciendo
El Rey Juan Carlos I y el Cardenal arzobispo Carlos Amigo Vallejo, en compañía del alcalde y del Presidente de la Junta, reinauguraron el edificio en septiembre de 2008. Perdió su carácter parroquial, dejándola en manos de San Isidoro.
            Su fachada es manierista, con tres módulos separados por dobles pilastras, que se repiten en los extremos. Sobre los módulos se abren tres puertas, siendo la central la más destacada. El interior tiene tres naves casi iguales; la central con bóveda caída, con un crucero de tambor poligonal.
El Cristo del Amor

La Virgen



            En su interior tiene 14 retablos. Los nombres en internet. Destacar: El Retablo del Cristo Amor y el Retablo de la Virgen de las Aguas. Procesiona el Cristo del Amor el Domingo de Ramos Y Jesús de la pasión, el Jueves Santo. Cuando estuvimos el Cristo del Amor estaba expuesto delate del Altar mayor, en la nave central, en un altar realmente precioso, con adornos florales.
El Cristo del Amor
            Salimos  a la plaza. Una cerveza nos estaba esperando en el bar de enfrente,
Lugar idóneo para una cerveza.
fresquita con unas papas fritas, que le apetecieron a mi mujer. Continuamos andando, pues buscábamos un lugar para comer tranquilamente, sin prisas, pero cerca del hotel en Reyes Católicos y descansar después un rato. Lo encontramos en la calle Zaragoza, a buen precio y comida excelente. Descanso, siesta reparadora y al camino de nuevo.
            Dirigimos nuestros pasos hacia la Plaza de la Encarnación. Ya la habíamos visto la noche anterior, iluminada y dejamos su visita para hoy. Sacamos las entradas correspondientes, que iban acompañadas de una consumición en un bar de la plaza cuando termináramos la visita.
"Las setas" de noche

"Las setas" de día
Excelente idea. Cogimos el ascensor y allá que nos subimos a las “Setas”. Desde el comienzo de su construcción no me gustaron y ahora, después de varias veces de ir a Sevilla y “pasar” de ellas, estamos en la parte superior. Las vistas son magníficas, pero no terminan de gustarme las dichosas “setas” y el lugar en el que se encuentran, emblemático para Sevilla. Hay para todos los gustos; unos sí, otros, no. Yo, de los segundos.
           
Vista de Sevilla desde las "setas"

Paseando por las "setas"
Nos dimos un paseo por la parte superior, hicimos una serie de fotos, para la posteridad y de recuerdo de nuestra estancia en ella. Bajamos y en la plaza nos tomamos una cerveza bien fresquita. Festivo, estaba la plaza hasta los “topes” como solemos decir. Más o menos como Sevilla. Llena de gente en la calle, comprando, gastando, viendo. En definitiva, de puente del Día de Andalucía.

Sevilla desde las "setas"

            Después nos dedicamos a callejear por Sevilla, sin prisa; cogidos de la mano, disfrutando de las cosas que veíamos y de nosotros mismos.


La Campana estaba de bote en bote, con sus dulces y sus nazarenos de chocolate.
Calle Sierpes
Sierpes era un hervidero de gente. La plaza del Ayuntamiento ya se estaba preparando para colocar las tribunas para la Semana Santa y en Plaza Nueva,
Ayuntamiento
los niños jugaban tranquilamente. Por Colón llegamos a Plaza de Virgen de los Reyes. Iluminada la catedral con las luces de la noche parecía otra muy distinta a la que habíamos visto durante la mañana, con los primeros rayos de sol, iluminando su fachada.
            Andando con tranquilidad por calle Zaragoza, de nuevo, ya tarde nos fuimos en busca de un lugar donde tomar una cerveza fresquita, unas tapas y dormir. Lo encontramos justo enfrente del hotel donde nos hospedamos. Una ducha, descanso y al día siguiente, para Córdoba.

Cándido T. Lorite

jueves, 2 de abril de 2015

SEVILLA. DÍA 27. LA CATEDRAL Y GIRALDA

Acabamos de ver los Reales Alcázares y dirigimos nuestros pasos hacia la Catedral. La cola para sacar las entradas era bien larga y hacía un calor bochornoso. Lentamente la cola avanzaba mientras hacía alguna que otra foto del giraldillo que hay en la puerta de entrada. Nos introducimos dentro y nos encontramos con un pequeño museo y algunas piezas realmente interesantes.
           
Vista aérea. Catedral de Sevilla
La Catedral de Sevilla se constituye bajo la advocación de Santa María de la Sede, de ahí que también sea conocida como Catedral de Santa María de la Sede; por su tamaño es la catedral católica más grande del mundo y el tercer templo cristiano.


            Desde la conquista de la ciudad, el 23 de noviembre de 1248, el edificio de la aljama, o Mezquita Mayor, pasó a ser catedral de la Archidiócesis del Reino de Sevilla. mezquita, que era hacia el sur como todas las mezquitas occidentales, por la orientación cristiana hacia el este, colocando la Capilla Mayor en el lado de levante. La quibla quedó como muro lateral, y en el lugar del mirhab se situó una capilla de la Virgen. Entre los pilares de la sala de oración se tendieron tabiques para crear capillas junto a los muros laterales. Con el paso del tiempo los muros, paredes y pilares se fueron cubriendo de retablos y pinturas.
Plano Catedral de Sevilla
El edificio cambió la orientación litúrgica de la
A finales del siglo XIV la mezquita estaba muy estropeada, con riesgo de ruina. El Cabildo catedralicio pensó derribar el edificio almohade para construir una catedral de formas cristianas. Es el momento en que, al acabar el cabildo del viernes 8 de julio de 1401 en que decidió iniciar un nuevo edificio para la catedral hispalense, uno de los canónigos pronunció una frase que resume bien el espíritu de los sevillanos:
“Fagamos un templo tal e  tan grande, que los que la vieren acabada, nos tengan por tontos”
                        Catedral gótica
Desde el principio se ideó un grandioso templo gótico, muy austero y riguroso, que pese a su extensión y a los setenta y cinco años que duró la obra, mantuvo su estilo hasta el final. Se inauguró, aunque a falta de algunos remates, en 1506, sin que se introdujeran cambios notables en el plan original.

A diferencia de lo que era costumbre, la construcción se inició por los pies del templo, pues el rey Enrique III no permitió que se derribara la Capilla Real situada en la cabecera, donde estaban las tumbas de San Fernando III y Alfonso X. La primera piedra se colocó en el año 1403,
Urna de Fernando III el Santo
donde luego se ubicaría la Capilla de San Laureano, la primera en acabarse y donde fue enterrado el arzobispo 
Alonso de Exea, muerto en 1417. En 1432 ya estaba terminada la mitad occidental de la catedral, por lo que se pidió el correspondiente permiso al monarca Juan II para demoler la vieja Capilla Real; autorización que fue concedida, haciendo posible la continuación de las obras, que se finalizaron primero en 1506 al cerrarse completamente sus bóvedas, y posteriormente en 1519 tras la reposición del cimborrio caído.
            Catedral renacentista
Corresponde al periodo iniciado en 1528, cuando se crea una notable serie de dependencias anexas al templo gótico como son: la Sacristía Mayor, la Sala Capitular y otras dependencias anejas, y el conjunto de la cabecera con la Capilla Real,

todo ello de la mano de una serie de artistas de primer orden que se inicia con Diego de Riaño, nombrado maestro mayor de la catedral en el citado año.
La Sacristía Mayor se comienza según trazas de Riaño de 1530, quedando interrumpida en 1534 ante la muerte del maestro. Diego de Siloé acudió a Sevilla entonces para comprobar las obras, y se cree que dio las trazas para su continuación, en clave renacentista, aunque adaptadas a la planta cruciforme iniciada.
Sala Capitular

Sacristía Mayor

La Sala Capitular de planta elíptica, sus muros superiores se ordenan según columnas dóricas sobre pedestales apoyados sobre un gran friso volado. Su cúpula elíptica se divide en tres franjas superpuestas, con casetones, y se remata por una linterna también elíptica, en una composición sobria de marcado carácter renacentista.
Retablo altar mayor
La Capilla Real una de las obras renacentistas claves de la ciudad, comenzada por Martín de Gaínza en 1551 a buen ritmo, que se truncó cinco años más tarde a la muerte del maestro. Entonces es elegido maestro mayor de las obras Hernán Ruiz II, correspondiéndole a él, por tanto, la realización de la cúpula hacia 1562. A su muerte le sucede Pedro Díaz de Palacios, quien continuó con las labores decorativas, hasta su destitución en 1574, siendo reemplazado por Juan de Maeda, entonces maestro mayor de la catedral de Granada, quien acabó la capilla al año siguiente.
Catedral barroca
Corresponde casi exclusivamente a la construcción de la parroquia del Sagrario, cuyas obras se iniciaron en 1618 y no se concluyeron hasta1663. Su obra se ajustó esencialmente al proyecto inicial, con una sorprendente organización estructural que da paso a un gran espacio interior donde no faltan los grandes elementos escultóricos y ornamentales.
Coro

Detalle coro
La monumentalidad de este templo se ve incrementada por el patrimonio escultórico que posee, donde sobresalen las ocho enormes estatuas de piedra realizadas por el flamenco José de Arce en el año 1657, y que representan a los cuatro Evangelistas y a los Padres de la Iglesia; así como el gran relieve de «La Piedad» que en 1666 realizara Pedro Roldán para el retablo de la Capilla de los Vizcaínos del ya desaparecido Convento de San Francisco, y que se encuentra actualmente en esta iglesia.


Neogótica
Comenzó en 1825 un breve proceso, dedicado a la terminación de las partes que habían quedado inconclusas en las etapas anteriores. Son las obras de las tres portadas principales del templo, que quedaban por hacer: la puerta de La Asunción, al pie de la fachada principal a la Avenida de la constitución, y las dos puertas del crucero: al sur la la puerta del Príncipe y al norte la de la Concepción, abierta al patio de los Naranjos.
Capillas de la Catedral de Sevilla
Capillas del lado norte y lateral del Coro:

Capillas de:
-el Pilar (con imagen de Pedro Millán, fue fundada por los caballeros aragoneses que participaron en la toma de Sevilla),
-los Evangelistas (con retablo del siglo XVI),

-las Doncellas( con relieve sobre la Anunciación),
-brazo norte del Crucero (el lienzo sobre “Alegoría de la Inmaculada Concepción”, de Alfonso Grosso, es la única pintura del siglo XX),
-San Francisco (con "El éxtasis de San Francisco", pintura barroca de Herrera el Mozo)
-Santiago (con cuadro central de Roelas y sepulcro gótico del cardenal Mena; sobre él, el relieve renacentista de la Virgen del Cojín),
-Scalas (por la ciudad italiana cuyo obispo encargó el sepulcro renacentista, aunque está enterrado en Roma; destaca la renacentista Virgen de la Granada),
-San Antonio (bautismal, con dos magníficos cuadros de Murillo, uno de ellos "El Bautismo de Jesús" y el otro, "La Visión de San Antonio"), portada del Sagrario (tardorrenacentista).

Capillas de
-San Gregorio y
-la Estrella (con imagen renacentista)
Capillas del muro de los pies y Trascoro

-
los Jácomes (con una pintura de Roelas, “La Piedad”),
-San Leandro,

Ante Cristóbal Colón

-San Isidoro y
-altar del Ángel de la Guarda (con cuadro de Murillo).
Capillas del lado sur lateral del Coro:
-San Laureano,
-Santa Ana (con el sepulcro del cardenal de la Lastra, por Bellver),
-San José (cuya imagen central se debe a José Esteve y en cuya cripta fue enterrado temporalmente el cardenal Bueno Monreal),
-San Hermenegildo (donde hay que significar el sepulcro gótico del cardenal Cervantes, debido a Mercadante de Bretaña),



-de la Antigua (del siglo XVIII son el retablo y el sepulcro neoclásico del obispo Salcedo, realizado por Duque Cornejo; frente a éste se encuentra el mejor sepulcro de España en estilo renacentista: el del cardenal Mendoza, por Fancelli; la pintura central es gótica del siglo XIV. En ella todos los 1 de noviembre se canta un Te Deum, en agradecimiento de que el Terremoto de Lisboa, de 1755, derrumbó algunas bóvedas durante una misa sin daños personales),
-brazo sur del Crucero (con el mausoleo neogótico de Colón, proyectado por Arturo Mélida a fines del XIX y la pintura mural de San Cristóbal, por el italiano Pérez de Alesio),
-los Dolores,


-San Andrés, con el protobarroco “Cristo de la Clemencia” de Montañés,
-tránsito a la Sacristía Mayor y
-capilla del Mariscal (con retablo del siglo XVI y pinturas de Pedro de Campaña).


                        LA GIRALDA

La Giralda es la torre campanario de la Catedral de Sevilla. En su origen fue el ALMINAR de la mezquita Mayor almohade de Isbiliya.  1987, no sólo destaca por su ubicación e historia, también debemos subrayar su factura arquitectónica, su función a lo largo de los siglos y su significado dentro Casco Antiguo de la ciudad.  Mezquita Kutubia de Marrakech (Marruecos). Su aspecto actual data de 1568, año en el que se concluye su cuerpo de campanas, obra del arquitecto Hernán Ruiz II, que recreció el viejo alminar almohade con cuatro cuerpos decrecientes rematados por una escultura en bronce que representa el triunfo de la Fe (el giraldillo), que le sirve de veleta y da nombre al conjunto.

Fue construida a imagen y semejanza del alminar de la
Patrimonio de la Humanidad desde
Como curiosidad cabe destacar el hecho de que la Giralda no tiene escaleras, sino 35 rampas suficientemente anchas para permitir que el sultán subiera por ellas montado a caballo para ver la bella estampa que se divisa.
                       
PATIO DE LOS NARANJOS

La Catedral es un edificio insólito que posee cinco naves, que se distribuyen con perfecta orientación musulmana, mirando hacia levante.  girla, ya que su planta es un perfecto rectángulo que se corresponde milimétricamente con la de la alhama, de la que heredó, también, la insólita disposición de las puertas.

El aspecto más controvertido de ella es que no cuenta con una cabecera en el sentido gótico habitual en forma de ábside con

En relación a los muros, hay que decir que cuentan con poco espesor.  vitrales.
Sin embargo, las capillas están separadas por estribos perpendiculares al eje central del templo, terminando en 28 pilares adosados que, con otros 32 exentos, soportan a 68 bóvedas ojivales. La luz natural es escasa, ya que las ventanas son pequeñas y soportan bellos.









Cándido T. Lorite