domingo, 4 de diciembre de 2016

CAZORLA Y SABIOTE (2)

Un buen desayuno en la Casa Rural Plaza Santa María de Cazorla; las gracias a Rocío, la dueña de la misma por su regalo y, ANDANDO.
            Cogimos el coche y  salimos de Cazorla camino de Sabiote. Al pasar por el cruce a Santo Tomé, me acordé del Innonbrable en Bailen, al menos para mucha gente y comenté con mi mujer la imposibilidad de que la Batalla de Baecula se diera en semejante lugar, tan lejos de la ruta de Castulo. Cosas del dinero.
Torreperogil

Nave central. Virgen de la Misericordia

            Seguimos adelante y en el cruce con Torreperogil cogimos el camino a Sabiote. Paramos en la puerta de la ermita de la Virgen de la Misericordia, cerrada. Le hice una foto desde fuera y en el interior, lo que pude. Lamentable; un domingo y cerrada. Y no era temprano. El horario que ponía no se estaba cumpliendo. Llegamos a Sabiote, aparcamos cerca del Castillo, y nos dispusimos a callejear. Pedimos un callejero de la villa, el horario de la visita al Castillo y, en el entretiempo entre ambas, anduvimos la villa de Sabiote.
Portada sur
La última vez que visité este pueblo y este castillo hacía la friolera de 25 años, pero es que la impresión que dejó en mí, fue malísima; un castillo lleno de cabras, sucio, maloliente y un pueblo dejado de la mano de la alcaldía. Ahora mismo es como si le hubiesen dado una vuelta al calcetín. Todo diferente; limpio, visitable, peatonal en algunos lugares, con muchas cosas para visitar, etc. Lo iremos viendo.
Campanario y torre

Belen
            Comenzamos a andar y recalamos en la iglesia de San Pedro Apóstol, reedificada en el siglo XVI con trazado de Alonso Barba, discípulo de Vandelvira.
Arco 

Belen en San Pedro
La portada norte es gótico isabelino, pero la sur es de estilo plateresco. Un gran arco en la esquina sujete el peso de la iglesia en la parte sur. La torre es de Aranda Salazar. Una vez en su interior descubrimos el trabajo que estaban realizando algunas personas. Un enorme e interesantísimo nacimiento, con todos los artilugios e ingredientes propios. Es conocido en muchos lugares de Jaén, provincia y limítrofes. Dejamos algunas fotos.
            Seguimos al parking, gratuito, y nos dirigimos al mirador del Parque Manuel Jurado. Las vistas son maravillosas.
Plano Sabiote

Cerca del mirador
Puerta ojival y muralla 
Ayuntamiento de Sabiote

Magníficas vistas
Un lugar tranquilo. Seguimos el camino bordeando la muralla por el Pasaje Torreones, con muchas escaleras, (para los que no quieran, se puede ir al mismo sitio por calle Corregidor). Las escaleras eran nuestro sino este fin de semana. Llegamos al ayuntamiento y, enfrente, la calle peatonal San Ginés, En ella encontramos el convento e iglesia de Santa María,
Convennto de Santa María

Escudo de Sabiote en San Ginés.
de carmelitas de clausura. Esta iglesia se edifica sobre otra anterior, románica. Se conserva la reja del coro alto. Fue fundado por Francisco de los Cobos y su esposa María de Mendoza. Es de estilo renacentista, con un claustro, no visitable, de arcos de medio punto.
            En esta calle de San Ginés, al igual que en las calles anteriores vimos paños de muralla y torreones que aún existen de la ciudad fortificada que fue Sabiote. Continuamos por la calle San Miguel, con una buena cantidad de casas y palacios señoriales de marqueses, condes y duques de la época de florecimiento de la villa, como la de los Mendoza, Teruel, etc.
San Miguel y, al fondo, San Pedro

Plaza de Vandelvira
Llegamos hasta la Plaza de Vandelvira, que aún conserva el encanto de la época renacentista. Bajamos por el Callejón de Martínez, hasta la plaza del Castillo, sacamos nuestras entradas, 4 € cada uno, sin descuento para nadie y nos dispusimos a visitar el Castillo. (Información de Wikipedia)
            El Castillo de Sabiote (Provincia de Jaén, España) fue construido en el siglo XIII, aunque debido a la preeminencia defensiva que ocupa el cerro en toda la comarca de La Loma, debió ser un lugar encastillado por todas las civilizaciones, desde tiempo inmemorial.
Castillo de Sabiote

Plaza del Castillo y entrada al mismo

Ya fue prácticamente rehecho tras la reconquista por Juan de Zuñiga en el siglo XIII. Su aspecto actual de fuertes murallas y aspecto de bastión elegante e imponente y el acabado actual que conserva, no es debido a sus comienzos, sino a la reconstrucción del siglo XVI que mando hacer Don Francisco de los Cobos, secretario de Carlos V, allá por el siglo XVIcon el fin de convertirlo en su noble palacio-residencia. Corrió a cargo de Pedro de Vandelvira, y está inspirado en fortificaciones italianas renacentistas, influjo de los viajes de éste "señor todopoderoso de La Loma", Don Francisco de los Cobos y Molina, que precisamente conoció a Vandelvira en Italia.
Segunda planta del Castillo

Patio de armas

En el castillo se conservó, durante varias décadas, la escultura de Miguel Ángel conocida como el San Juanito de Úbeda, hasta que fue trasladado a dicha localidad, a la Sacra Capilla del Salvador.
Lamentablemente, el castillo fue expoliado y volado por las tropas napoleónicas durante su ocupación, por lo que interiormente sólo queda el esbozo de lo que fue una destacada obra de arte. El ayuntamiento se encarga de su actual conservación y restauración,Escudo de lo Francisco de los Cobos 
Esquina del Castillo
a la espera de un proyecto integral de reconstrucción que recupere el aspecto original que tuvo en su día.
Mazmorras del Castillo

Castigo

            La visita estuvo muy bien. Sólo le encontré una pega y fue importante. El guía que nos enseñó el castillo hizo EXCESIVO HINCAPIE en las Fiestas Medievales de Sabiote. En cada sala o lugar del castillo, las sacaba a colación.
Caballerizas.
Ya digo, fue excesivo. Como lo fue el hecho de hacer propagando de Hallowen en el interior del Castillo y el número más o menos importante de visitas que tuvo. Ambas cosas, aunque estén dentro de sus competencias, se pueden decir, pero no insistir hasta la saciedad.
            Terminamos la visita serían las 14 horas, y desde allí, cogimos el coche y nos dirigimos hacia Bailén. El fin de semana había acabado y llegábamos, sanos y salvos, aunque muy cansados. Hogar, dulce hogar.
Cándido T. Lorite