jueves, 31 de octubre de 2019

DATOS DE INTERÉS. ROMA. DE NUEVO






         Con motivo de los diez de nuestro matrimonio, organicé para nosotros, un viaje de vuelta a la ciudad de Roma. Algunas cosas se nos quedaron por ver, caminar, admirar y este fue el motivo del viaje a la Ciudad Eterna, Roma. Iniciamos el viaje el 16 de octubre y volvimos el 24 del mismo mes.

         Unos datos sobre la ciudad de roma, siempre son convenientes, para todos aquellos que se dirijan a esta ciudad. Fuera de España hay que tener precauciones.

Datos de interés para viajeros españoles en Roma:

Teléfonos:
Prefijo de Roma: 0039
Ambulancia: 118
Policía: 113.
Embajada española: (0039) 0668440401 y en el Palacio Farnese
Oficina de turismo de España: Plaza de España, 55; (0039) 066783106

Aparte de estos datos hay uno de especial interés para todos aquellos que se desplacen a Roma. Hace ocho años en muchos lugares de roma no se admitían tarjetas de crédito para el pago por los servicios. Afortunadamente esto ha cambiado y el 90% de los establecimientos te admiten casi toda clase de tarjetas.
El metro de Roma es bastante sucio, sobre todo la Línea B, la que apenas usan los visitantes. La línea A por usarla más los turistas está en mejores condiciones. Se está construyendo una tercera línea, la CC; pero aún no esta en servicio. Quizá para Navidad o año 2020, lo esté. Como contraprestación existe una red de autobuses y tranvía muy efectivo. Tan efectivo que nos hemos quedado de piedra. Todos los viajeros de autobuses y tranvías de la ciudad de Roma, NO PAGAN EL BILLETE. Entran por cualquier puerta, se sientan y cuando llega el final de su trayecto se baja y, como decimos en España, aquí paz y después gloria. Los únicos que pagamos o al menos, los que hemos visto que pagan, somos los turistas, sean de la nacionalidad que sean. Será porque estamos acostumbrados a pagar cada vez que nos subimos en el metro y el autobús. Es increíble.
Te dicen que si te coge el inspector te pone una multa de 100€, pero ¿qué turista va a pagar la multa y dónde si no lo hacen los propios romanos?. Debe ser una de las características de los romanos y así le va a Italia.
Otra cosa fundamental para los visitantes o turistas es que la mayor parte de las cosas o monumentos se han de ver a pie, con lo que el cansancio es mayúsculo. Se bebe mucha agua y se echa fuera, lo que es otro problema. No hay lugares donde hacer una micción, o una “meada” o “mear” u “orinar”; llámelo cada uno como quiera, pero es realmente difícil. Hay algunas estaciones de metro, como Coliseo que tiene aseos dentro de la estación. La mayoría de monumentos los tienen, pero una vez en la calle lo tienes muy crudo. ¿Consecuencia? Mucha gente lo hace en los jardines, o detrás de un árbol o en alguna calleja vacía. No hay aseos públicos como los hay en París o Lisboa, o Londres o cualquier otra ciudad europea. Y es un problema para los turistas. Aunque algunos bares te dejan entrar siempre y cuando lo pidas con educación y consumas alguna cosa. Por cierto, compren una botella de agua pequeña, en un súper y luego, la rellenan con el agua de los montones de fuentes que hay en Roma. El agua es potable, fresquita y en la zona de Via Apia, puede que salga ¡Hasta con gas!. No es broma. Eso sí, bajo ninguna circunstancia paguen los dos euros que les piden por una botella pequeña. Es un robo.
El metro hay que tomarlo con calma; también te puedes ”colar”, aunque lo normal es que la mayoría de turistas se compran una Roma Pass, tarjeta que se compra en estancos, quioscos, oficinas de turismo, etc. Valen 25€ cada una pero sirven para ver museos, la mayoría de ellos, Monumentos y lugares de interés. Hay una lista de ellos cuando la compras, te duran tres días y la entrada a los dos primeros es gratis. La enseñas en el metro o en el autobús y no has de pagar por montarte. Para amortizarla sólo basta una cosa: has de ver muchas cosas y andar mucho, pero compensa, pues las entradas a los monumentos cuestan bastante dinero.
Si no quieres hacerlo asi, te puedes comprar, como hemos hecho nosotros un billete, CIS, de una semana para autobús, metro y tranvía, montándote todas y cuantas veces quieras. Cuestan 14 euros y se compran en metros, quioscos, Oficinas de Turismo, etc.
Tengan cuidado, mucho cuidado con los carteristas; sobre todo en colas y grandes aglomeraciones. Los romanos están hartos de tanto turista y ellos van a lo suyo. ¿Qué quiere decir esto? Que, aunque tú, como turista no tengas prisa, ellos sí la tienen para llegar a su trabajo y andan, dando empujones a la gente. Normal. No se lo tengan en cuenta. Están en su ciudad, nosotros vamos a disfrutarla y ellos, a sufrirla.
¡Ah!, se me olvidaba. Cuidado con los bares y restaurantes de Roma. Hay algunos de ellos que ponen los precios de la comida, pero no la de la bebida. ¿Porqué lo digo?. Por que en la Plaza Venecia, hay un bar que se llama Brasil, donde estuvimos comiendo el viernes. La lasaña y los canelones que nos comimos eran "relativamente baratos" (17€ ambos platos), pero pedimos dos cervezas, una con alcohol y otra sin alcohol y nos cobraron 15'50€ por las dos. Como no tenía puesto el precio no hubo motivo para reclamar. Así que ya saben los turistas que lean este blog. Pidan el precio de las cosas antes de tomarlas.
Solo me queda desearles que su visita a Roma sea tan bonita e interesante como la que nosotros hemos tenido.


Cándido T. Lorite