lunes, 15 de abril de 2019

UN VIAJE A TURQUÍA. DÍA 6. AFRODISIAS. EFESO. KUSADASI




          
            Seguimos con nuestro camino. Ahora hacia un lugar que, aunque visto con anterioridad a través de fotos, etc, no pensábamos que nos iba a impactar tanto. Me refiero a Afrodisias y Éfeso.
"autobús" para Afrodisias
Después de un excelente desayuno, cogimos el autobús y nos dirigimos hacia Karacasu y SelÇuk, en la provincia de Aydin y llegamos a un sitio realmente “encantador”. Dejamos el autobús y cogimos un transporte en ¡tractor con remolque cubierto!, con los colores de Andalucía. La cuestión de este transporte estriba en que el camino para llegar a Afrodisias no permite otro tipo. Lleno de baches, embarrado y pequeño. Una aventura, que duró poco tiempo.
            Se presentó ante nosotros, Afrodisias.
Afrodita en el Museo

Busto de Afrodisias, Museo.
Solos, sin nadie que nos molestara; como dijo Erdem, la época y lo apartado del lugar hacen que muchos turistas no la visiten. Mejor para nosotros. Afrodisias fue una pequeña antigua ciudad griega en Caria. Recibe su nombre de Afrodita, la diosa griega del amor, cuya estatua residía en el templo allí ubicado. Fue construida cerca de una cantera de mármol, utilizada extensamente por los griegos y los romanos. Su escuela de arquitectura y escultura fue muy conocida y famosa.
Algunas estatuas de Afrodisias.
De ahí provienen la gran cantidad de estatuas, templos y sepulturas que adornaban la ciudad. El ejemplo más famoso de escultura es la Afrodita de Afrodisias, cuyo legado ha llegado hasta Beja, Portugal. Está situada en una zona sísmica, por lo que ha sufrido de ellos a lo largo de la historia. El ocurrido en el siglo VII, cuando se llamaba Estaurópoli (Ciudad de luz), hizo que la ciudad no se recuperara y perdió influencia.
            Comenzamos por un paseo realizado para indicar el camino a los visitantes.
Tretápilo

Tetrápilo

Tetrápilo

Tetrápilo

Tetrápilo

Delante del Tetrápilo
Nos llevó al Tetrápilo, construido como una entrada ornamental, durante el siglo II, en la calzada principal norte-sur y daba a un enorme atrio enfrente del templo o Santuario de Afrodita. Es de una belleza y majestuosidad impresionante, sin ser especialmente grande. Tiene cuatro puertas, una en cada una de las fachadas y se encontraba rodeado de cuarenta columnas. Bonita forma de comenzar la visita. Desde aquí nos trasladamos hacia el estadio.
Imagen del estadio

Para la posteridad

Imagen frontal del etadio
Es el mejor conservado del mundo, 262 m de largo y 58 m de ancho, con capacidad para 30000 espectadores. Nuestro guía nos hizo una “jugarreta”. Nos dijo que no tenía nombre y nosotros, al ver la magnificencia del mismo, exclamamos:¡OHHH!! Erdem, automáticamente, nos dijo: Le habéis puesto de nombre OHHH; otros grupos les han llamado de ¡La virgen!, ¡Coño!, etc, etc, La sensación, desde luego es tremenda. Gradas, espacio, altitud, todo, tremendamente perfecto, a pesar de los siglos transcurridos.
Templo de Afrodita

Columnas Templo Afrodita

Parte Templo de Afrodita
            Continuamos nuestro recorrido y llegamos al Templo de Afrodita. Construido íntegramente en mármol, con 13 columnas a cada lado, 8 en la entrada lateral y otras 8 en el extremo opuesto. Fue de los más venerados al culto de la diosa. La estatua de la diosa que se encontró en el templo, se halla en el museo.. Al lado del templo se encuentra un pequeño Odeón o buleterión. Se utilizó como lugar de teatro y música pero también como lugar de las reuniones del consejo Local. Está construido en mármol blanco y azul y para unos mil setecientos espectadores.
Imageen del Odeón

Esperando en el Odeon, a los músicos
De aquí, a las termas de Adriano, unos fabulosos baños térmicos construidos hacia el siglo II. Tenían cinco galerías en mármol blanco; hoy hay una estatua de Apolo en el lugar correspondiente. Siguiendo el recorrido, circular en todo momento, llegamos al estadio, para unas ocho mil personas.
Estaddio al lado del templo de Afrodita.
            De aquí al Sebasteión, templo dedicado a la diosa Afrodita y al emperador Augusto. Representa la idea de  relacionar su poder con la diosa Afrodita, madre ancestral. Allí se contemplan dos filas de columnas, con un patio central. Se encuentra un edificio de tres plantas con relieves y frisos.
El Sebasteión

            De allí al museo.
Sebasteión

Detalle del Sebasteión

Detalle del Sebasteión

Columnas patio ceentral Sebasteión

Parte frontal patio Sebasteión

Detalle columnas sebasteión


Detalle Sebasteión

Parte superior del Sebasteeión

Las caras teatrales

Detalle caras

Otro detalle
Indicar, antes de entrar en el museo que, debido a mis molestias, me quedé solo contemplando lo visto y haciendo fotografías del Sebasteión, desde el interior. Luego me dijo el guía que no se podía bajar, aunque yo ya lo había hecho, por unas “escaleras” que había. Es quizá por eso que las fotos de ese lugar sólo las tengo yo, del grupo. Ya se las pasaré a mis compañeros para que las disfruten.
            Y al museo. Un lugar increíblemente bello, no por el museo en sí, sino por la enorme cantidad de estatuas en mármol, de la época romana en un estado perfecto de conservación. Ni los museos capitolinos de roma tienen algo parecido a éste otro.
Museo Afrodisias

Museo de Afrodisias

Museo de Afrodisias

Museo de Afrodisias

Museo de Afrodisias

Las "tres gracias" de Afrodisias

Museo de Afrodisias

Capitel museo Afrodisias
Bajorrelieves, estatuas de Afrodisisas y una diosa Afrodita, realmente maravillosa. Salimos de Afrodisias con la sensación de haber visitado un lugar magnífico. Una ciudad en la que en época antigua se debía vivir muy bien.
            De nuevo a nuestro “tractor-autobús”. De allí al nuestro, de verdad, y a Éfeso.
            Éfeso tiene dos entradas, una superior o secundaria y otra principal o situada en la parte baja. Cómo teníamos nuestro autobús hicimos el recorrido de arriba-abajo y allí nos esperaba nuestro conductor. Hablar de Éfeso es hablar de una ciudad esplendorosa. Famosa, antigua. Centro cultural, religioso y comercial que la convirtió en una de las cuatro capitales más importantes de Roma. Por aquí pasaron Heráclito, Alejandro Magno, Cleopatra, Marco Antonio,  César Augusto, la Virgen María y los apóstoles Juan y Pablo.
Maqueta de Éfeso
Plano de Éfeso
Y por supuesto, nosotros; disfrutamos tanto o más que ellos.
            Caminar por Éfeso es hacerlo por un museo al aire libre. Un plano detalla aquellos lugares que íbamos a ver y vimos. La erosión y la sedimentación del río alejaron a Éfeso del mar y, por consiguiente, de su fuente de vida. Este fue uno de los motivos de su decadencia. Disfrutar de este impresionante lugar histórico sin gente, es algo realmente extraño. Desde luego, la fecha elegida para el viaje, finales de febrero-primeros de marzo, hizo posible este “milagro”. Nos pudimos hacer fotos sin nadie y sin esperar. Con toda la calle de los curetes para nosotros..
Termas de Vario

Pritaaneo de Éfeso

Parte del Pritaneo

Entrada al Odeón

Odeón

Templo de Domiciano
Empezamos la visita por la entrada secundaria, situada en la parte superior, la llamada Puerta de Magnesia, encontramos una explanada donde se encontraba la basílica, el ágora, la fuente del pollo, el Pritaneo y el Odeón. El pritaneo era el lugar de reunión de los magistrados de Éfeso, construido en el siglo III por Lisímaco y proseguida por Cesar Augusto. Aquí se encontraba el fuego sagrado bajo la protección de la diosa Artemisa. El odeón tenía una capacidad de 1400 prsonas y servía, también, como reunión de senadores.
columnas de Hércules

Calle de los Curetes


Sosteniendo las columnas

Así visitamos Éfeso. Una maravilla
Seguimos por la senda o calle de los curetes, situada entre las puertas de Hércules y Adriano. La primera tiene dos columnas con figuras e inscripciones del héroe. Aquí, en plan hercúleo, se hicieron muchas fotografías los integrantes del grupo. Había total tranquilidad en el ambiente. Vamos que estábamos solos en la visita. Bajando la calle nos encontramos con la fuente de Trajano y el  templo de Adriano.
Fuente de Trajano

Añadir leyenda

Nosotros solos en la calle de los Curetes, Éfeso
La fuente tenía una estatua del emperador y fue construida con motivo de su llegada a la ciudad, conserva cuatro columnas corintiasy unos frisos en el pórtico junto a una cabeza de Medusa. En la fachada del templo se conservan los pedestales de las estatuas de Diocleciano, Maximiano, Constantino y Teodosio. La via o calle de los curetes estaba repleta de tiendas y comercios.
Mosaicos de comercios en Curetes

Letrinas

Detalle Letrinas

Templo de Adriano

Templo de Adriano

Antes de llegar a la puerta de Adriano nos encontramos a la derecha, con unos servicios u orinales, donde apareció el famoso pene de Príapo.
Justo al lado y en la parte izquierda de la bajada nos encontramos con la Biblioteca de Éfeso o de Celso.
Biblioteca de Éfeso

Biblioteca de Éfeso
Fue construida en el año 114 d.C. en honor de Julius Celsus Poleamaeanus, gobernador de la provincia roomana de Asia. Llegó a tener en su interior entre 12000 y 15000 papiros y pergaminos,
Para el recuerdo. Éfeso


Ágora

Puerta de Augusto de acceso al ágora

Plaza del agora
colocados, según costumbre, en los huecos de los muros. En su fachada se encuentran cuatro estatuas de Las Virtudes: Arete, (la bondad); Ennoia )el Pensamiento); Epistene (el conocimiento) y Sophia (la Saiduría). Las estatuas originales se encuentran en el Museo de Éfeso.
Cruzamos la Puerta de Augusto y entramos en el ágora; un mercado de 110 m2, construido por Augusto en el año 3ª.C.
Indicando el camino

El teatro de Éfeso

Teatro Éfeso

Última imagen de Éfeso. El teatro.
Seguimos la via sacra y encontramos una piedra muy especial, con diferentes dibujos indicativos, de la línea a seguir para ir a los prostíbulos (pie), etc, Y llegamos, al Gran Teatro. Sus orígenes se remontan al s. III a.C.n bajo el reinado de Lisímaco, pero fue reformado y ampliado en época romana. De extraordinaria acústica; desde aquí se accedía a la Avenida del Puerto, para llegar al mismo en el Mar Egeo. Al lado se encuentra la palestra y las termas públicas.
Por las fotos expuestas nos damos cuenta de la grandeza de Éfeso, tanto antigua como modernamente. Cogimos el autobús que había ido de la puerta secundaria a la principal, para evitarnos el volver a subir y de allí, nos dirigimos hacia el hotel en Kusadasi.
Un día completo, magnífico, extraordinario; pudimos apreciar la belleza de Afrodisias y la magnificencia de Éfeso.
Cándido T. Lorite
27-02-2019